

Una vecina de la calle Larga dio ayer la voz de alarma tras sospechar que un individuo quería estafarla con 300 euros. Los hechos tuvieron lugar por la tarde, cuando la mujer regresaba a su casa después de dar un paseo y fue abordada por un desconocido.
Según cuenta una nieta de la víctima a Hoy Casar, «venía de dar un paseo y justo al abrir la puerta se le metió un señor en casa que le dijo que iba de parte del Ayuntamiento, y que le tenía que enseñar recibos de agua y de luz». La mujer, que se encontraba sola, le respondió que esos temas los llevaba su hija. Pese a su edad se percató de que podría ser una estafa. El individuo insistió y le llegó a pedir 300 euros por la gestión que tenía que hacer. «Ella sospechó y empezó a llamar a los vecinos, y él salió corriendo, tenía el coche aparcado un poco más abajo y se fue», destaca.
Los pocos datos que lograron recopilar los vecinos fue la marca del turismo en el que huyó a toda prisa el presunto estafador, quien conducía un Hyundai de color blanco. «Los vecinos intentaron coger la matrícula pero no pudieron, no les dio tiempo», añade su nieta.
Posteriormente los hechos fueron puestos en conocimiento de la Policía Local. Hoy el Ayuntamiento ha emitido un aviso a través de redes sociales. «Pedimos máxima precaución a todos los casareños, especialmente personas mayores y colectivos vulnerables, al abrir a personas desconocidas», indican.
No es la primera vez que este tipo de hechos suceden en la localidad y, como en este caso, las víctimas suelen ser personas mayores. Sin embargo, en esta ocasión la astucia de la anciana evitó que fuera timada en su propia casa.
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