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Domingo, 29 de septiembre 2024, 21:56
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La última romería del año en Casar de Cáceres se ha podido disfrutar hoy gracias a la buena temperatura y el sol que ha acompañado a los casareños a lo largo de toda la jornada.
La Virgen del Prado ha regresado esta mañana a su ermita, con un vestido y manto de color rojo que hace 38 años le regaló una devota casareña. Tras la misa celebrada en la parroquia la imagen ha puesto rumbo después de diez días, y ya sin el bastón de mando, a su santuario. Hasta alli se han aproximado centenares de personas que han querido estar junto a ella. A la una del mediodía se ha llevado a cabo la eucaristía, que ha vuelto a contar con una gran presencia de asistentes.
Hoy la Virgen no ha salido en procesión. Algunas de las personas han dudado si saldría por las proximidades de la ermita, pero ese acto sólo se produce en su día grande del Lunes de Pascua. Tras la misa alguna devota ha expresado a las nuevas camareras lo guapa que lucía la Virgen. Con ese mismo vestido permanecerá cuando a partir del martes la suban ya a su camarín. «Se lo vamos a dejar puesto», han expresado.
Durante toda la jornada el ir y venir de gente para visitarla ha sido constante. Decenas de velas y donativos, de rezos y cantos se han quedado entre las paredes de la ermita que data del siglo XV. El paraje de La Jara se ha llenado de corrillos, de familiares y amigos, que han pasado una larga jornada campera. Muchos consideran que a este día de romería acude más gente que en la de abril. «Es domingo y la mayoría de la gente no trabaja, y además ha hecho muy buen tiempo», han expresado a Hoy Casar algunos asistentes.
A esta cita tampoco han faltado los caballistas de la asociación ecuestre Virgen del Prado. Una única caseta de bar, además del existente en la casa de los ermitaños, y un vendedor de helados han ofrecido sus servicios en este encuentro. «Las romerías han cambiado mucho», ha comentado un casareño. Lejos queda el recuerdo de las grandes fiestas vividas en las casetas disfrutando de la música. «Realmente no nos hace falta nada más», le han respondido. En definitiva, la cuarta romería del año (la segunda de la Virgen) se ha disfrutado con tranquilidad, en un entorno repleto de arboleda, bajo la que se han podido resguardar los casareños del generoso sol que han tenido hoy como testigo.
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