Centenares de casareños disfrutan de una tarde mágica en compañía de Sus Majestades de Oriente

Los casareños han vuelto a disfrutar de una tarde llena de ilusión. Los Reyes Magos han hecho que centenares de personas hayan salido hoy de sus casas para acompañarles en su recorrido.

Los niños han desfilado tras las carrozas, y se han centrado en mirar a Sus Majestades, a la vez que no han cesado de recoger caramelos. «El que más ha repartido ha sido Gaspar», comentaba la madre de un niño. Ciertamente no ha habido tregua para Melchor, Gaspar y Baltasar. Los niños casareños les han pedido de forma reiterada a los Reyes y sus pajes que lanzaran caramelos, y ellos han cumplido.

También los han lanzado a las puertas y balcones de las calles por las que ha pasado la comitiva real, y en los que aguardaban su llegada otros vecinos. La recogida de caramelos es para todos, adultos incluso, uno de los principales atractivos de la cabalgata. Hay quienes han temido que entre los numerosos lanzamientos les llegara un impacto con este dulce, y a otros directamente ese denominado 'caramelazo' les ha cogido descuidados.

La Plaza del Ayuntamiento ha vuelto a recrear un Belén viviente, en el que no han faltado José, María y el niño Jesús. Integrantes del grupo de teatro Perséfone, acompañadas por varios niños y otros vecinos, han representado la vida junto al portal y han dado la bienvenida a los Reyes Magos en el momento que han bajado de sus carrozas para la adoración al Niño.

En ese mismo lugar el Ayuntamiento ha obsequiado a los asistentes con una ración de migas y chocolate. Muchos no se han querido perder esta rica merienda, que han disfrutado a la salud de los Reyes Magos. «Qué bien sientan con este frío», ha expresado un vecino.

Luego el recorrido ha continuado por las calles Avenida Constitución, Plaza de la Llanada y Plaza de los Toros, calle Iglesia, del Santo y regreso por el Paseo de Extremadura hasta la casa de cultura. Allí se ha realizado el habitual reparto de regalos a algunos vecinos.

Ha sido una tarde mágina para los niños pero también para las personas mayores. Quienes han tenido la suerte de ver pasar a los Reyes por la puerta de sus casas han mostrado sus caras de satisfacción. Sus Majestades no han parado de saludar a todos los vecinos que se asomaban para verlos.

Tanto Policía Local como voluntarios de Protección Civil se han encargado de velar por la seguridad de niños y adultos en este encuentro que se ha prolongado durante aproximadamente dos horas.

Y es ahora, tras una tarde muy especial, cuando todos los niños duermen para dejar que los Reyes Magos hagan su labor, la de traer ilusión otro 6 de enero a Casar de Cáceres.