La iglesia volverá a abrir sus puertas a partir del lunes y habrá algunas restricciones durante el culto

La fase 1 de la desescalada prevista para este 11 de mayo también contempla la celebración de los cultos. Ese día los fieles podrán acudir a la iglesia pero el aforo se limita a un 30%. En la fase 2 de la desescalada se permitirá ya el 50%.

Entre las medidas de seguridad que deberán adoptarse está la de respetar la distancia de seguridad de 1,5 metros entre asistentes, tanto de derecha a izquierda como por detrás y por delante de cada banco. Las familias que convivan juntas podrán sentarse en el mismo banco sin guardar dicha distancia.

La iglesia deberá ofrecer gel hidroalcohólico a sus fieles. Las pilas de agua bendita estarán vacías, y se recomienda a los fieles que acudan al templo con mascarillas. Tampoco se pasará el cestillo de la colecta durante el ofertorio, sino que se ofrecerá a la salida de la misa con medidas de seguridad.

Las misas se llevarán a cabo por las tardes de lunes a sábado, y el párroco Luis Vidal Arias ha confirmado que los domingos se realizarán a las 11.00 y a las 12.00 horas para facilitar la participación.

La paz se suprimirá o será sustituida por otro gesto que evite el contacto físico. Habrá que evitar aglomeraciones en la puerta, y el orden de salida será de atrás hacia adelante, por orden de bancos. Los bancos de la parroquia deberán desinfectarse entre misa y misa.

Mientras dure la desescalada no se permitirá la participación de coros, ni tampoco se contará con la presencia de monaguillos. Además, se restringe a una sola persona la que realice la lectura de la eucaristía.

Otra de las novedades es que la Comunión se distribuirá en silencio, y no habrá diálogo, aunque se realizará posteriormente de forma colectiva. Se entregará en la mano y el sacerdote deberá desinfectárselas antes y después de dar la comunión. También habrá que guardar una distancia entre los fieles que comulguen de 1,5 metros.

Durante el periodo de desescalada no habrá ni comuniones ni confirmaciones. Pero sí se podrán celebrar bautizos y bodas con el aforo limitado. Hasta la fecha sólo se mantiene en la agenda del sacerdote una boda para este verano.

Si se permite llegado el momento, las Comuniones podrían celebrarse en septiembre, y aún no se ha fijado fecha para las confirmaciones.

A partir del lunes la parroquia también podrá celebrar funerales, aunque con un límite de 15 personas.