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Sábado, 30 de abril 2016, 12:05
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La Cofradía de Ánimas ha vuelto a cumplir este año con una de sus tradiciones más antiguas. Ayer, la mayordoma y diputadas de este colectivo repartieron 1.200 bollas de anís entres los niños, jóvenes y mayores del municipio.
El pan que fue bendecido a primera hora de la mañana por el párroco se repartió en todas las aulas del colegio público León Leal, en el centro infantil Zarapico y en el IES Vía de la Plata. También llegó a los mayores del centro de día y pisos tutelados, así como a otros ancianos y enfermos del municipio.
Es un día muy bonito y nos hace mucha ilusión repartir esta bolla porque es una tradición de nuestro pueblo, señalaron las integrantes de esta cofradía, que también entregaron un millar de pergaminos con el significado del reparto de este pan. En los años de posguerra tenían como objetivo paliar la necesidad de alimentos que padecía la gente, detallan.
Asimismo piden que esta costumbre se siga pasando de padres a hijos y se conserve como parte de la riqueza cultural y la idiosincrasia de la localidad.
Quienes la recibieron agradecieron este regalo que ayer llegó a la mesa de muchos hogares casareños.
Este domingo la Cofradía celebra uno de los actos religiosos más importantes del año con la celebración de una ecuaristía, en la que la mayordoa y diputadas acuden ataviadas con sus mantillas.
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