Retiran la Cruz de la calle Larga Alta y la traladan al cementerio

A primera hora de la mañana la Cruz de la calle Larga Alta ha sido finalmente trasladada al cementerio. A las 7.30 horas, los operarios municipales del servicio de obras tenían todo a punto para retirar el crucero, y con la ayuda de una grúa, se ha realizado sin sufrir daños.

El Ayuntamiento anunció hace unos meses que sería trasladada de lugar, una decisión que provocó la polémica en las sesiones plenarias por el desacuerdo del Grupo Municipal Popular, quienes consideran que la Cruz es un símbolo religioso.

El Consistorio autorizó su retirada a petición de la Diputación de Cáceres. Por este motivo, la Asociación Española de Abogados Cristianos comunicó el pasado 17 de mayo la presentación de medidas cautelares para evitar la retirada de la cruz.

Esta mañana todas las miradas se han centrado en la plazuela en la que la Cruz ha permanecido durante más de 25 años. Se trata del cuarto traslado que se realiza, ya que la primera vez se instaló en el arandel de la iglesia. Posteriormente se lució en el Paseo de Extremadura, y en la década de los noventa se cambió hasta el lugar en el que ha permanecido hoy.

Las dos peanas que soportaban la Cruz no han podido salvarse, y los trabajadores municipales las han eliminado picándolas. La Cruz se elevará sobre otra peana de granito en la entrada del camposanto, visible tras cruzar la puerta de la ermita, según ha explicado el alcalde, Rafael Pacheco.

La casareña Lola Espada guarda en su móvil el momento de retirada de la Cruz. Justo delante de ella ha vivido ella toda su infancia, al igual que sus padres y abuelos. «Cuando la pusieron aquí dijimos al alcalde de aquellos años que mejor la hubieran trasladado al cementerio, aquí lo que deberían poner es un monumento representativo del pueblo, alguna escultura de un pastor con ovejas, o algo relacionado con la Torta», ha indicado esta casareña.

Este lugar queda libre para ubicar otro monumento. Será una escultura que homenajeará a los abuelos. El diseño es del actor Santi Senso. «Será de hierro pero aún no está hecho, y la idea es que las familias casareñas participen entregando platos que se unirán a esta nueva escultura», ha precisado Pacheco.