La Semana Santa en miniatura de César Carretero

La imaginación de un niño es poderosa. Se podría decir que no conoce límites y de esta forma consiguen que, lo que más les gusta, pueda suplir a la realidad. Y eso es lo que ha hecho César Carretero Pacheco, de 11 años. Ha creado su propia Semana Santa en miniatura.

Este año, debido a la crisis del coronavirus, no podrá participar en una de las celebraciones que más le apasiona. Por eso, César se aferra a las costumbres casareñas y reemplaza las vivencias de años pasados por otras recreaciones en la que los protagonistas son los pasos que él mismo ha creado.

Ayer se encargó de sacar en procesión a la imagen del Cristo de la Peña. Lo hizo en su casa, ante la presencia de sus padres y hermana. El paso del Cristo lo realizó hace dos años, por la devoción que siente hacia él. De hecho, forma parte de la Hermandad.

Este año ha creado la imagen de la Virgen, a la que por primera vez sacará en procesión, en el pasillo de su casa. Ha usado todo tipo de materiales que tenía a mano, entre ellas, cartón y telas. «Las flores también las he hecho yo con papel de colores y las velas de la Virgen son de plastilina», cuenta. También tiene una iglesia que él mismo ha elaborado con cartón.

Ya tiene todo listo para que desfilen los nueve pasos que participan cada noche de Jueves Santo en la procesión de La Pasión. Él mismo será el capataz de todas ellas. Para hacerlo posible utiliza algo más de una veintena de playmóbils, que suplantan a las figuras religiosas. También usará los Santos de cerámica que tiene en su casa. Con ellos recrea cada personaje, para conseguir que el paso quede lo más adaptado posible. Le ha dado especial protagonismo a la música, y a sus pequeños personajes los ha adornado de variados instrumentos, hechos también con plastilina.

Cada día hace un recorrido, a su libre imaginación. «Empecé el Viernes de Dolores», dice. Esta tarde también ha tenido un recuerdo especial para la procesión de El Beso de Judas que cada año sale en Cáceres este día de Jueves Santo. «A veces les pongo música, las marchas típicas de Semana Santa y los grabo en vídeo», resalta.

César disfruta con lo que hace. «Le gustan mucho las tradiciones del pueblo, y nosotros estamos encantados porque con la situación que tenemos es otra forma diferente de vivir la Semana Santa, él se entretiene mucho y acabamos todos entretenidos en casa con lo que él hace», destaca su progenitor, Carlos Carretero.

Estos días en casa de esta familia casareña habrá distintos desfiles. «El Viernes saldrá la Virgen también y el Domingo de Resurrección haré la procesión de El Encuentro», añade el menor.

Este año César tampoco podrá cantar saetas en la calle. Esa es otra de sus pasiones desde hace cinco años. El pasado lunes lo hizo de forma virtual, con la Hermandad del Cristo de la Salud de Cáceres a la que también pertenece.

Mientras aguarda el momento en el que pueda cargar con las imágenes casareñas, vive ilusionado con sus pequeñas creaciones. «La primera imagen que cargará será con La Piedad, por petición de su abuela Prado», dice su padre. Ya sabe que, a los 14 años, también podrá portar la Cruz de Mayo en la Hermandad del Cristo de la Salud de Cáceres.